Como especialista y formadora en yoga somático en ocasiones me han preguntado si el yoga somático está indicado únicamente para adultos mayores.
La respuesta categórica es no.

Ciertamente los adultos mayores pueden aprovechar los recursos que brinda, ya que desarrolla la longevidad con funciones motoras intactas realizando ejercicios que son accesibles para ellos.
No obstante, muchos de sus beneficios pueden ser aprovechados por varios grupos etáreos con grandes resultados.
Uno de sus principales beneficios es superar la Amnesia Sensorio Motora – un estado habitual de olvido o pérdida de la memoria de cómo se sienten los músculos y de cómo controlarlos- en palabras de Thomas Hanna “ya que esto ocurre al nivel del sistema nervioso central, no tenemos conciencia de que suceda”[i]. Entonces no sentís tu cuerpo y por consiguiente no llegás a darte cuenta de lo tensionado que estás.
Este problema se puede dar en muchos momentos de la vida pero a mediana edad, en un momento de mucho trabajo y preocupaciones, hace estragos con la vitalidad y disminuye el potencial de vivir una vida plena.
Los jóvenes con trabajos muy demandantes pueden llegar a sufrirla también con alto impacto en su desempeño. “La AMS, continúa Hanna, nada tiene que ver con la edad, puede ocurrir y ocurre, a cualquier edad.”
Encontrar una pausa para desarrollar los recursos necesarios para alcanzar el equilibrio es necesario en muchas edades y el yoga somático brinda las herramientas para lograrlo de forma simple, con movimientos que no requieren un estado físico o flexibilidad extraordinarias.
Al alcance de todos los que quieren aprovechar la mayor longevidad del siglo XXI pero con las funciones motoras intactas, pudiendo disfrutar cada momento en actividad y cumpliendo sueños y objetivos.
¿A qué edad es eso?
No tiene edad.
[i] Hanna, Thomas (1988) Somatics, despertando el control de la mente sobre el Movimiento, la Flexibilidad y la Salud. Instituto Novato de Investigación y Entrenamiento en Somática